CUIDADOS
La ropa deportiva, al igual que los trajes de baño, se confeccionan en Lycra. Por lo que se merecen el mismo cuidado...
¡Es muy IMPORTANTE que sigas estos consejos para que tus prendas sigan divinas como el primer día!
1. NO PLANCHAR
Ya que podés llegar a marcar la tela o terminar con su elasticidad.
Sin embargo, ésto no suele ser un problema ya que nuestras telas no llegan a arrugarse.
2. NO RETORCER
Ni para guardarlas, ni para escurrirles el agua luego del lavado.
Podrías llegar a provocar que tus prendas pierdan su forma.
3. Tº MÁXIMA DE LAVADO: 30ºC
No lavar tus prendas en agua que supere los 30ºC.
Podrías llegar a dañar las fibras de las prendas y así perder su elaticidad o modificar su tamaño.
AC #TIPS DE CUIDADOS
TIP #1 - NO TE DEMORES MUCHO TIEMPO EN LAVAR TUS PRENDAS
Las baterias que quedan en tu ropa después de hacer ejercicio pueden empezar a causar malos olores. Además, si te tomás mucho tiempo en lavarlas, el olor a sudor queda impregnado y se vuelve muy difícil de quitarlo.
TIP #2 - AGREGÁ UNA PIZCA DE SAL EN EL PRIMER LAVADO
Agregar una cucharadita de sal cuando lavás tu ropa deportiva por primera vez puede hacer una gran diferencia. Gracias al cloro que está en la sal, el color puede mantenerse más vibrante por un período mayor de tiempo y así lograr que no se destiña.
TIP #3 - LAVAR A MANO
Aunque la ropa deportiva sea mucho más durable y resistente que el resto de prendas, lavarla en lavarropas puede deteriorarla con el tiempo. Si no tenés tiempo de hacerlo, usá tu lavarropas en un ciclo muy suave con un jabón delicado que cuide tus prendas.
TIP #4 - NO USES BLANQUEADORES O SUAVIZANTES
Usarlos puede llegar a dañar la tela y la elasticidad de tu ropa deportiva. Un super tip para blanquear tus prendas es hacer una preparación de jabón neutro rallado con unas gotitas de shampoo y dejar en remojo.
TIP #5 - NO USES SECADORA NI LA TIENDAS AL SOL
El calor de las secadoras o la exposición directa al sol puede hacer que tus prendas se estiren, deformen o queden marcadas por el broche. Lo ideal es que cuando laves tus prendas, las pongas al revés y las seques en un lugar ventilado a la sobra.